jueves, 28 de noviembre de 2013

El jinete eléctrico


Mañana viernes, 27, a las 19.30 horas, estaré con mi amigo Joaquín Pérez Azaustre. Presentamos su libro Vida y Leyenda del Jinete Eléctrico, un maravilloso libro de poemas (o de poema, más bien), premio Jaime Gil de Biedma.


Poco tengo que decir de Joaquín. Yo no puedo ser imparcial con una persona a la que tanto quiero y con la que he compartido cervezas y palabras, noches y madrugadas, versos y abrazos.

Cordobés de nacimiento y madrileño en ejercicio, Joaquín es sin duda uno de los grandes poetas actuales. Imágenes deslumbrantes, ritmo y música en su poesía, y el alma en sus líneas.

Estaremos en la Liberría Méndez en la Calle Mayor 18, con Antonio y Alberto que han hecho de su profesión un canto a la literatura y al libro. Viven el libro y lo comparten. Comparten su sabiduría con cada uno de los amigos que en las tardes de frío buscan refugio y amparo en esta librería, siempre abierta a todos.

Os espero. Lo pasaremos bien. Hablaremos de versos y de amores perdidos, que viene a ser lo mismo.

(Por cierto, como podéis ver en el cartel, Joaquín y yo hemos salido clavaos)

martes, 26 de noviembre de 2013

El tiempo es el cobarde

El tiempo es el cobarde. Y estos días
de sábanas y cuartos sin ventanas.
El tiempo, solo el tiempo. Tal vez sea
esta noche  la misma. Cuando fumas
tranquila y a mi lado. Y me sonríes.

Espacio para un tiempo sin relojes,
abierta está la cama y arrugada
por el placer de cuerpos y humedades.
Tienes en el costado lunas rotas,
y una voz que reclama: “dame un beso”.

En la niebla adivino –igual que un tango-
el triste parpadeo de tu sangre.
Ni siquiera un mañana que amenace
esta absurda esperanza de creernos
eternos este amor y estos abrazos.

Y fumas en mi boca. Echas el humo
en mi vientre y te ríes mientras miras.
Mañana será tarde. Siempre eres
lo mejor de los mapas del instante.
El aceite con pan de mis mañanas.

Qué importa que los tiempos nos sean crueles,
que maten y nos hieran, si en mi mano
conservo los papeles de tu boca,
la promesa firmada de que nunca
podrán los calendarios con nosotros.

Aunque tengas otros dedos en tu carne
nunca podrás librarte de estos brazos
que te buscan de noche y te recuerdan
que el tiempo es el cobarde. Y lo he vencido.

jueves, 21 de noviembre de 2013

Emiliano ya está aquí

Emiliano del Río llega a España. Ya está aquí. El 23 de noviembre en Barcelona.En la Sala Pipiolo, Carrer de Balmes, 113. A las 21.00 horas. Su música, su poesía, el alma de Emiliano para todos. No dejéis de ir a verlo, a vivirlo y beberlo.

Aquí tenés todas las fechas. Yo tengo el orgullo de poder compartir con él la noche del 5 de diciembre en Libertad, 8.

martes, 19 de noviembre de 2013

Dulce sol de diciembre

Los días del pasado, cuando era el futuro
el calor del verano y la belleza libre,
y todo parecía como el pan de los dioses,
y la palabra nunca y la boca de dicha.

Aquellos días amados, como refugio eterno,
como la piel cubriendo los huesos y la carne.
Y mañana era un verso caliente por la sangre,
y un  regusto de vino en el pecho del mundo.

Fui feliz como eran los santos primitivos,
los fieros cazadores, los guerreros sin patria.
La noche estaba viva como estaban los cuerpos
en madrugadas tibias de café y de tabaco.

Hoy que ya no poseo ni la lanza ni el verso,
ni siquiera el recuerdo de toda la hermosura
que entonces caminaba  mi lado y mi sombra
me detengo un instante para unir los despojos.

De todas las batallas perdidas no conservo
ni el botín más humilde que pueda llamar mío.
Y así, ante la derrota, me someto a tus manos
para dormir en ellas. Dulce sol de diciembre.

lunes, 11 de noviembre de 2013

Harto

Harto de medicinas y de males, 
de recuerdo y nostalgia para nada,
de no saber de ti, de que no llames,
de amores de café de madrugada.

Harto de no beber besos ni copas,
de no encontrar tus labios en mi armario.
de equivocar tu nombre en otra boca,
de que seas mi cruz y mi calvario.

Harto ya de este lunes sin semana,
harto ya de que siempre sea pecado
lo que mejor sé yo hacer entre las sábanas
y tú sabes hacer en cualquier lado.

Harto de todo, de alcohol y de reproches,
de esta pasión de nubes y de infiernos
de los turbios deseos de la noche,
no busco primaveras en invierno.

Pero puesto a buscar, busco un remedio
para esta enfermedad y esta locura.
No quiero recordarte. Ni lo intento.
El olvido es, tal vez, la única cura

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Dejar de fumar



Hay años que es mejor no levantarse,
dejar que pase el tiempo, no asomarse
a ninguna ventana ni al abismo.
Encender un cigarro que te mate
limpia y dulcemente, como deben
matar todos los vicios y venenos.

Y pensar que la vida, al fin y al cabo,
es esta soledad de los papeles,
el cansancio de agujas y aspirinas,
los dolores sin ti, la amarga náusea
de no saber qué haces o por donde
te mueves ahora mismo o en quién piensas.

Son los días extraños. Cuando pesan
noticias en periódicos y busco
algún bar donde olvidar la vida lentamente.
Recuperar la noche y los recuerdos,
dejar para mañana las promesas.

Porque, a pesar de todo, en esta hora
me llega la certeza más exacta
de qué nada ha cambiado y continúan
los miedos en la puerta de la casa.
Y ahora, en fin, cuando ya nada
puede cambiar las cosas, te confieso:
Ni dejé de fumar ni te he olvidado.